Mundos digitales emergentes

El campo de la arquitectura ha experimentado numerosas transformaciones importantes. Más recientemente, movimientos estilísticos como el posmodernismo, el modernismo o el art nouveau han sido el resultado evolutivo de los cambios en el contexto social, económico, cultural y tecnológico. Por lo tanto, no es de extrañar que cuando el mundo evoluciona, también lo haga la arquitectura. Si miramos más atrás en el tiempo, podría decirse que el Renacimiento, que vio nacer el dibujo en perspectiva como herramienta para imaginar nuestro mundo y cuestionar la realidad, surgió gracias a un descubrimiento tecnológico, aunque analógico. Parece evidente que la arquitectura se ve afectada por olas de cambio y modas que fluctúan entre el énfasis en el arte y la tecnología, nuestros dos principales modos de producción. Cada época arquitectónica a lo largo de la historia parece enfrentarse desesperadamente a la anterior, buscando y dando origen a la siguiente. Por lo tanto, ¿qué futuro nos espera en un mundo en el que la inteligencia artificial está destruyendo nuestros modos de producción tradicionales? ¿Hacia dónde nos llevará la evolución de los medios y soportes del dibujo?

En los últimos tiempos, las crisis económicas unidas a rápidas innovaciones tecnológicas han dado lugar a grandes cambios. En los años 70, la enorme inflación obligó a los arquitectos a dirigir su afán creativo hacia cotas teóricas y artísticas debido a la falta de opciones para construir. Hoy en día, en el Reino Unido, la inflación está en máximos históricos, la reforma de la enseñanza de la arquitectura está muy avanzada y, tras la tragedia de Grenfell, los grandes cambios en el marco legislativo han restringido aún más las libertades de los arquitectos. La arquitectura, una vez más, se encuentra en un momento de grandes transformaciones.

Junto con los factores socioeconómicos, el zeitgeist tecnológico actual viene definido por una de sus muchas expresiones: el Internet de las cosas, la realidad virtual o aumentada, la inteligencia artificial, las transacciones de blockchain, ¡o por todas ellas! Sin embargo, quizás sean las redes sociales la innovación más significativa de todas, no sólo porque casi todo el mundo las utiliza a diario, sino también porque el teléfono inteligente se ha convertido en un nuevo órgano o miembro humano. En el ámbito arquitectónico, compartir, difundir y comercializar nuestro trabajo en «todas las plataformas» de Internet se ha convertido en una norma cultural establecida para empresas y particulares. Además, los algoritmos de las redes sociales, aunque superficiales, no discriminan. Cualquier persona, de cualquier origen y situación económica, ya sea la mejor o peor conectada, puede lograr el reconocimiento mundial «descifrando el algoritmo». A pesar de tratarse de un soporte digital, tiene implicaciones muy reales. La arquitectura accedió a los soportes digitales con la llegada del software de diseño asistido por ordenador (CAD), pero la migración total al mundo digital es tan reciente como la creación de Instagram. Estudios y arquitectos de renombre mundial como David Adjaye, Norman Foster, Bjarke Ingels e incluso la difunta Zaha Hadid existen también en este mundo de píxeles de bolsillo en la medida en que los centros de datos lo permiten. Sin embargo, «personas influyentes» y líderes de opinión menos establecidos comparten escenario, a veces, con audiencias y alcance mucho mayores, lo que demuestra que éste es realmente un momento único en nuestra disciplina.

Con semejante diversidad de conocimientos y experiencias disponibles en Internet, no es casualidad que millones de profesionales y estudiantes de todo el mundo acudan en masa a las redes sociales y se inspiren en ilustradores de arquitectura, personas influyentes y profesionales que desafían los límites. Se trata de individuos, colectivos y prácticas que están rompiendo moldes, libres de cualquier restricción, libres para expresar su verdad y construir su marca. Es posible que ya estés al tanto de que uno de los nichos que realmente domina esta revolución es el de los «dibujos arquitectónicos en las redes sociales» y, más concretamente, en Instagram. ¿Por qué? La capacidad de plasmar ideas, pensamientos y sueños en expresiones artísticas con el fin de que existan para siempre en una realidad tangible, aunque digital, es el medio de supervivencia que necesitamos en un sector tan competitivo. Es lo que nos hace únicos y aumenta el valor de nuestra oferta. Este mundo digital emergente de la arquitectura en las redes sociales se convertirá, y quizá ya lo haya hecho, en nuestra nueva normalidad.

A pesar de las predicciones distópicas sobre la desaparición de la inteligencia humana en favor de la inteligencia artificial o, peor aún, de la inteligencia artificial general, todo apunta a que los humanos no nos iremos sin plantar batalla. Lo cierto es que nuestra existencia digital y la inteligencia artificial siempre serán híbridas mientras sigamos comiendo, bebiendo y respirando. Mi objetivo es comprender la imparable trayectoria evolutiva de nuestra profesión y cómo las innovaciones digitales y tecnológicas pueden facilitar las interacciones humanas en lugar de dictarlas. Este es el mayor reto y la mayor oportunidad a la que nos enfrentamos a medida que nos adentramos en los mundos digitales emergentes.

Imagen principal: Sacred Syntheses 1, Dibujo híbrido a partir de IA. Imagen © Hamza Shaikh

Drawing Attention: Architecture in the Age of Social Media, Hamza Sheik, RIBA Publishing, 2023:

https://www.ribabooks.com/Drawing-Attention-Architecture-in-the-Age-of-Social-Media_9781914124389